Los medios masivos instalan términos muy peligrosos para la sociedad y la mayoría de la gente los repite de manera inocente. Si a esto le agregamos la irresponsabilidad cuasi delictiva del Presidente de la Nación, presionando a la Justicia para que “Manden al carnicero a la casa, porque es un ciudadano de bien” caemos en la cuenta de que ese conjunto de acciones configuran un caldo social demasiado peligroso.