En la capital jujeña, un hombre ciego intenta ganarse la vida en la peatonal céntrica, se pone un cartel contando su discapacidad, pone música en un pequeño equipo que está a su lado y acompaña las canciones con su voz. Tiene un tachito donde la gente le pone a voluntad monedas. Es todo. Como en tantos lugares del mundo, no digo del país. Pero, al socio político de Macri, Gerardo Morales, parece que no le gustan estas prácticas, y por segunda vez, ordenó a la policía provincial que lo detengan. Pero esta vez los filmaron, y los difundieron por las redes hasta llegar al periódico local, El Tribuno, de Jujuy. Allí se ve una inusitada cantidad de efectivos para detener a un hombre desarmado y ciego, y mucha violencia, lo arrastran por metros por la calle, mientras la gente se arremolina a su lado.