En un hospital público, más exactamente en Salta, el Salvador Mazza, una profesional, obstetra, maltrató y le negó atención a una joven embarazada por portación de cara. A la mujer, le pareció que la paciente era boliviana, y por ese motivo la trató de manera despectiva y con un alto grado de agresividad, la “acusó” como si esto fuera un delito de ser boliviana, y querer todo gratis.
La joven, que cursa el 5º mes de embarazo, es sobrina de un periodista de la localidad, quien dio a conocer el caso. Su sobrina le relató el maltrato sufrido, a pesar de que le presentaba insistentemente su carnet sanitario, que acreditaba su residencia en la provincia y también su D.N.I. que no dejaba dudas sobre su nacionalidad. Pero, claro, la pobre niña “tenía cara de boliviana” lo cual, para esta profesional, parece ser suficiente motivo para el destrato y la violencia.
Por suerte, luego de no ser atendida, la paciente se encontró con una agente sanitaria que también presta servicio en el nosocomio, y logró que la atiendan, con tan mala suerte que volvió a aparecer la obstetra, aunque ya con otro talante, e intentó explicarle como es el procedimiento cuando se presentan pacientes bolivianas, a pesar de que ya le había dejado en claro que era de nacionalidad argentina. De todas maneras, el caso fue puesto en conocimiento de la directora del hospital, la Dra. Mariela Fernandez. “Ninguna persona, boliviana, argentina o lo que sea, debe ser maltratada por nadie”, concluyó Costes, el periodista pariente.-
Patty Mariño Issler
