No vamos a victimizarnos, ni a horrorizarnos a esta altura de la kermesse, no obstante, vamos a contarles un poquito sobre “la cocina” de un medio digital.
Detrás de lo que lee o ve un visitante en cualquier periódico hay una cosa que los programadores llaman el “Back End” que es desde donde se administra, no solo las publicaciones, sino la estética, los alcances, difusión de las publicaciones y las estrategias de defensa ante ataques digitales.
El asunto es que normalmente para un periódico, no es necesario programar estrategias de defensa tipo pentágono (al menos eso creíamos) en nuestro primer año, en donde teníamos el portal alojado en un servidor “tradicional” pero notábamos que cada vez se nos hacía mas dificil defendernos de los ataques (Hackers) con “floods” (visitas masivas generadas por robots) para sobrecargar el sistema, a mirrors (espejos en otros servidores) y otro tipo de ataques mas complicados de manejar.
El asunto es que los ataques fueron cada vez mas virulentos y sofisticados, hasta que nos hicieron besar la lona y rastreando a los atacantes, llegamos a dos servidores ubicados en Rusia, que según nos informaron son lisa y llanamente mercenarios digitales, que se contratan para destruir a tal o cual portal por una muy importante suma de dinero.
Hablando en serio ¿tanto molestamos? ¿tanta plata vale destruirnos?
Ahí fue (hace una semana) decidimos contratar un servidor con los mismos parámetros de seguridad que un banco o una agencia federal de gobierno. Parece una locura. Pero así están las cosas, con tres días en el aire registramos 1.320 ataques maliciosos, esto da algo así como 18 ataques por hora (suponiendo que laburen las 24hs corridas) Hasta ahora no hemos registrado ninguna incidencia, (intrusión) y las fallas que puedan encontrar se deben a que seguimos trabajando en el nuevo servidor.
Esta nota es nada mas que informativa y aprovechamos para agradecer el tsunami de apoyos, solidaridades y puestas a disposición de colegas y lectores de todo el país, durante la semana en que desaparecimos de la web, enviar también un gran abrazo y agradecimiento a Leo Muñiz, que es de esos amigos que cuando estás en medio del despelote se pone a ayudarte casi de prepo, sin mas motivo que su enorme generosidad.
Y por últio, el mensaje para quien tanto molestamos. “Por las malas ni a la esquina”. Sigan participando.
Daniel Arce
