Quizá en esa ausencia de retóricas y metáforas abiertas, utilizadas habitualmente por los políticos, para ser (valga la redundancia) “Políticamente correctos” anide el secreto de una verdad profunda y reveladora.
Muchas palabras para expresar algo, no siempre son sinónimo de profundización conceptual. Vaya como ejemplo cualquier discurso presidencial, en el que con su media lengua, plagada de tropiezos semánticos y racionales, el mismo barbotea una y otra vez palabras que ofician de contenedores de deseos de un gran segmento de la población que comparte sus carencias intelectuales y quizá por ello sintonizan en la superficie de un mar infinito de 5 cmts de profundidad.
En este caso Andrea Rincón, en muy pocos segundos y anclando todo su análisis en una sola palabra, vierte una observación irrebatible, avalada por una realidad tan espantosa como la vivida en los momentos mas oscuros y siniestros de la historia argentina.
#MacriEsMafia
https://youtu.be/5TUb2Vt1Mf0