Mauricio Macri se encuentra abocado en levantar su imagen a como de lugar. Es sabido que desde su último pico que coincidió con las elecciones de octubre, viene cayendo en picada.
Y, obvio, las últimas medidas no lo ayudan para nada. Y, en lugar de remediar los enchastres que hace en contra del ciudadano argentino con tarifazos, endeudamiento, ajustazos y demás, se dedica a reponer las recetas duranbarbistas, que tanto resultado le han dado. Por ello, decidió que el entrañable Calabrese, cocinero argentino que ya le trajera algun dolor de cabeza cuando se levantó la polémica al mencionar “El Hit del Verano” en la TV Pública y luego desaparecer del aire, montara en Olivos el programa de cocina que es lo único que tiene algo de rating en la señal estatal.
El conductor no tuvo mejor idea que pedirle al presidente que le bata los huevos, y ¿podés creer que no sabía cómo hacerlo? Ridículo es poco, lo que hizo. Esperemos que no se la agarren de nuevo con el pobre Calabrese.
