Muy suelta de cuerpo o mejor dicho lengua dijo: “yo estoy muy lejos de las ideas Kirchneristas, jamás hice un paro ni acompañé a mis compañeros en las retenciones y ahora me echan con 22 años de trabajo“.
Patético me resultó verla con el cartelito en la mano denunciando su despido, diciendo que tiene 2 hijos y que uno es epiléptico.
Sin embargo sus compañeros la contenían. Ella, la que nunca hizo un paro ni acompañó a sus compañeros nunca se le ocurrió que había otras mujeres y/o hombres con 2 hijos y uno epiléptico y si lo pensó no le importó, total ella tenía trabajo.
A ella nunca le dolió el sufrimiento ajeno y, tal como expresa que “estoy muy lejos de las ideas Kirchneristas”, afirma que es de las que piensan que con sus impuestos mantiene vagos, que los negros son pobres porque quieren serlo, que los pobres son delincuentes y la policía hace bien en matarlos.
Ella es de las que cree a rajatabla en la meritocracia. Algo bueno tiene este gobierno: los está poniendo en su lugar, les está enseñando que pertenecen a la clase trabajadora y que no son oligarcas ni pertenecen a sector privilegiado alguno. Ahora Claudia va a aprender que va a tener que hacer “méritos” para poder mantener a sus hijos, que va a tener que salir a mendigar algún trabajito y cobrar lo que le den y no lo que merece, aprenderá que los pobres no son vagos y que los paros y retenciones sirven para conseguir derechos, esos derechos que ella gozó pero que no luchó ni acompañó para conseguirlos. La “señora” Claudia es mi tilinga preferida.
Ojalá aprenda. Creo que esto nos debe hacer pensar hoy más que nunca que ” LA PATRIA ES EL OTRO “
EDUARDO LOBATO
