Se va de finde largo a Chapadmalal. ¡Qué sorpresa! ¿no?
Mientras corren afiebradas especulaciones acerca de los 1500 millones de dólares de ayer y los 900 millones de hoy que el Banco Central se desprendió con el objetivo de frenar la corrida del dólar, que de todas maneras cerró en algunas provincia a 21 pesos, mientras millones de argentinos están esperando respuestas sobre los tarifazos impagables, algunos hasta organizan caceroleos en las plazas de sus pueblos, a ver si alguien los escucha. Una nueva devaluación en puerta y los consiguientes aumentos en absolutamente todo, el presidente silba despacito y ordena que le armen las valijas.
Tres días que sumará a los más de 90 que lleva acumulados de descanso desde que asumiera el gobierno nacional. Aparentemente ordenar el freno a los 29 proyectos presentados por la oposición para solucionar o subsanar el tarifazo energético lo dejó agotado.
Saldrá mañana, viernes y regresará el lunes por la noche (eso de que hay que trabajar sábados y domingos, lo dijo por nosotros, no por él, eso queda clarísimo, ¿no?) Hay que comprender que no se toma oficialmente vacaciones desde hace un mes exacto, en Semana Santa. Todo un récord.
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