En una situación crítica dentro del Gobierno, Guillermo Francos se veía prácticamente fuera hasta que un giro inesperado le brindó una nueva oportunidad. Mauricio Macri, al proponer a Diego Santilli como reemplazo, y Javier Milei, al respaldarlo, han puesto a Francos de nuevo en juego. En una reciente defensa en los medios, el Ministro del Interior argumentó a favor del Mega DNU y la “Ley Ómnibus”, insistiendo en su importancia para alcanzar el “déficit cero”.
Francos afirmó que el propósito central de estas medidas es conseguir los recursos necesarios para lograr el déficit cero, sin ceder en este objetivo. Advierte que, de no aprobarse, se buscarán recursos de otras maneras y se aplicará un ajuste alternativo. Asegura que la legislación no pretende afectar a las economías regionales y destaca que busca una Argentina más libre y competitiva.
El Ministro lamentó la falta de apoyo de algunos sectores del Congreso, especialmente de Milei, y señaló que el cambio es necesario para forjar una Argentina igualitaria. Reconoció la posibilidad de negociar aspectos de la ley y asumió la responsabilidad de ajustar propuestas si es necesario. Insistió en la urgencia de enfrentar la complicada situación del país y rechazó declaraciones golpistas de opositores, destacando la legitimidad de Milei como presidente electo.
A pesar de sus afirmaciones firmes, queda en duda si esta aparente disposición a negociar es personal o refleja un cambio en la postura autoritaria inicial del gobierno. La incertidumbre persiste sobre la permanencia de Francos en el gabinete nacional y hasta cuándo podrá mantenerse en esta situación precaria.
