En un sorprendente giro, Enrique Rodríguez Chiantore, recientemente desplazado de la Superintendencia de Servicios de Salud por el Gobierno de Javier Milei, expresó su indignación y calificó la situación como “espantosa” y “falta de ética”. Chiantore reveló los detalles de su abrupto despido en una entrevista con Radio Rivadavia.
Chiantore, quien asumió su cargo hace menos de dos meses, compartió su desconcierto al enterarse de su destitución a través de un mensaje de WhatsApp de Mario Lugones, asesor en salud del jefe de Gabinete Nicolás Posse. “Hoy a la mañana me levanté temprano y tenía varios mensajes diciendo ‘lo siento mucho’ y abrí el Boletín Oficial y me encontré con la noticia”, relató el exfuncionario.
El ahora exfuncionario expresó su sorpresa y descontento por la manera en que se manejó su despido. Señaló que no tuvo ninguna indicación previa de que esto pudiera suceder y se enteró de la noticia de manera repentina. Criticó la falta de profesionalismo y ética en el proceso, especialmente al no haber recibido una solicitud formal de renuncia.
Chiantore subrayó la falta de cortesía y educación en la comunicación de su despido. Se quejó de que, aunque podría entender la necesidad de colocar personas de confianza, se podrían haber seguido formas más apropiadas, como solicitar su renuncia directamente.
Ante la pregunta sobre si su destitución podría deberse a motivaciones políticas o si estaba vinculada al paro nacional reciente, Chiantore descartó esa posibilidad, afirmando que no tiene relación con la CGT y que sería absurdo suponer tal conexión.