Gran Hermano, el famoso programa de Telefe, dirigido por Santiago del Moro, se encuentra sumergido en la controversia mientras las acusaciones de fraude aumentan. Alan Simone, un participante destacado, ha desencadenado un escándalo al revelar que recibió sugerencias estratégicas desde el confesionario, planteando dudas sobre la integridad del reality.
Durante las últimas semanas, Gran Hermano ha enfrentado acusaciones de fraude no solo de sus seguidores, sino también de los propios participantes. Alan Simone, conocido por su controversia, ha tomado la iniciativa de exponer la “verdad” al declarar que la producción le indicó una estrategia de juego.
Desde el inicio de la temporada, el programa ha estado envuelto en escándalos, desde decisiones inesperadas de los seguidores hasta las alegaciones de favoritismo por parte de la producción. Las acusaciones previas de otros concursantes, como Juliana “Furia” Scaglione, ya habían planteado dudas sobre la imparcialidad del canal.
La atención se centra ahora en Alan Simone, quien compartió detalles de las instrucciones peculiares recibidas en el confesionario durante una conversación con Agostina Spinelli. “Me tengo un poco de fe porque siempre me shippearon con Sabrina y ese tema siempre está entre nosotros. De hecho, cuando fui al confesionario, ellos me tiraron un palo como que siga para ese lado. Quieren eso, entendés”, reveló Simone, generando incredulidad entre la audiencia.
Estas revelaciones provocaron un fuerte descontento en las redes sociales, donde los usuarios expresaron su disgusto y escepticismo sobre la transparencia del programa. “A Alan no me lo banco para nada, pero ya va más de una vez que expone que la producción lo lleva para el lado del shippeo con Sabrina“, comentó un usuario en Twitter. Otro internauta expresó: “La producción le cubre todo a Emmanuel, Alan y Sabrina los cuidan como nadie nunca los expone como detesto a los protegidos de la producción”.
