El giro digno de las mejores novelas de espionaje, la India ha decidido liberar a una paloma que estuvo tras las rejas por ocho meses bajo sospecha de ser una agente secreta al servicio de China. La historia, que suena más a guion de película que a realidad, involucra “mensajes escritos” en sus alas y una caligrafía sospechosamente similar a la china.
Un dramático episodio ornitológico, la policía india inicialmente acusó a la inocente paloma de espionaje internacional. Se abrió un caso, y lo que sigue es una historia digna de una película de Hitchcock con un toque de comedia surrealista.
La pobre paloma fue privada de su libertad y recluida en un hospital de la ciudad. Pasó ocho meses allí esperando que alguien se diera cuenta de que no era más que un pájaro corriente.
Mientras la paloma permanecía tras las rejas, las autoridades llevaron a cabo una investigación que, según fuentes fidedignas de la oenegé PETA, duró “sorprendentemente ocho meses”. ¿Qué secretos podría albergar un ave en ese tiempo? ¿Mensaje cifrado en el trino matutino?
Finalmente, la paloma recibió su “permiso formal” para la libertad. Se marcó así el final de una trama que podría rivalizar con las mejores historias de agentes encubiertos. La pregunta que todos nos hacemos: ¿volverá a volar hacia el abismo de la espionaje o disfrutará de su retiro ornitológico?
No es la primera vez que una paloma es señalada como sospechosa. En 2016, una fue detenida cerca de la frontera con Pakistán, llevaba un mensaje amenazante. En 2010, otra fue acusada de portar información clasificada, y se prohibió cualquier intento de visitarla, ya que se creía que estaba en una “misión especial de espionaje”.
Hasta las aves son protagonistas de intrigas internacionales. La historia de la paloma espía nos deja con la pregunta eterna: ¿Quién necesita agentes secretos cuando puedes tener agentes emplumados?
