En el ring político argentino, hay un enfrentamiento que está dejando boquiabiertos a muchos: Mauricio Macri y Patricia Bullrich están teniendo un cara a cara que hace temblar las bases del PRO. Y esto no es solo una pelea de palabras; es un drama político con intrigas, desconfianzas y mucha especulación.
La relación entre Macri y Bullrich, que antes era como pan y manteca, ahora parece haberse enfriado. Y la chispa que prendió este incendio fue cuando Bullrich se fue a negociar su entrada al equipo de Javier Milei, sí, ese mismo que está sacudiendo el tablero político con sus desmanes. Esto no le sentó bien a Macri, quien había intentado negociar con Milei previamente y no tuvo éxito.
Pero la cosa no se quedó ahí. Bullrich también se metió en el asunto de Chubut, tomando partido por Milei en contra de la línea oficial del PRO. Esto, junto con otros movimientos políticos, hizo que las alarmas se encendieran en el entorno de Macri. Ahora, ambos bandos se acusan mutuamente: los seguidores de Bullrich creen que Macri está detrás de todo el embrollo, mientras que los de Macri piensan que Bullrich está operando bajo órdenes de Milei para dividir al partido.
La pelea ha llegado a su punto álgido con la próxima asunción de Macri como presidente del PRO. Pero Bullrich no se quedó de brazos cruzados y trató de evitar esto con uñas y dientes. Esto podría ser el comienzo de un verdadero vendaval político dentro del partido.
Mientras tanto, los espectadores están expectantes, preguntándose qué pasará con el PRO y con la política argentina en general. Esta batalla entre Macri y Bullrich está lejos de terminar y promete sacudir los cimientos del partido y del país.