Un agente de la UDAI de Hurlingham (ANSES) fue sorprendido en plena jornada laboral echándose una siestita en su lugar de trabajo. Se trata del militante ultra PRO Diego Benavídez, quien se desempeña en la dependencia desde que Mauricio Macri ganó las elecciones presidenciales en diciembre del año pasado.
Es la mano derecha de la jefa de la UDAI local, Andrea Giorgi, quien ya fuera cuestionada tiempo atrás por haberse tomado vacaciones a Europa (fiel al estilo PRO) a pocos días de haber asumido el cargo.
Este personaje (y su jefa, ya que estamos) son muy resistidos por los empleados de carrera, ya que es acusado de espiar permanentemente a sus compañeros, los que quedan, ya que muchos fueron despedidos con el argumento PRO de que eran “ñoquis militantes K”. ¿?
Patty Mariño Issler