Realmente, de un tiempo a esta parte, estamos convencidos de que ya nadie cuida al presidente de todos los argentinos. Esto queda demostrado cada vez que aparece en público. De una manera u otra queda en ridículo. Va de papelón en papelón.
Hoy se conmemoraba el 208º aniversario del Ejército Argentino. El presidente, como Comandante en Jefe, se apersonó en el festejo y dio su discurso, leído, claro está. Pero, parece que ni la fonoaudióloga oficial, que tanta plata nos sale a todos los contribuyentes, ni la profe de teatro, ni Isabelle Anderson, la coach de líderes que trajeron del extranjero, ni Durán Barba logran que por lo menos, lea sin equivocarse.
Y volvió a equivocarse. Miralo.
– Advertisement –