El Dictamen “Blue” a Punto de Caer por la Comisión de Delitos Graves | Sin Censura – Periodismo independiente

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El escándalo en torno al dictamen blue de la Ley Ómnibus ha tomado un giro inesperado. Nuevas revelaciones que apuntan hacia lugares insospechados. En medio de acusaciones y deslindes, la trama se complica. Involucra a prominentes figuras políticas y arrojando luz sobre encuentros secretos fuera del ámbito legislativo.

El ex radical y actual libertario Cristian Caram, inicialmente señalado como el epicentro de la polémica reunión, ha salió a desmentir vehementemente que la cumbre se haya llevado a cabo en su domicilio. La presión aumenta y Caram difundió un comunicado para distanciarse del escándalo que amenaza con extenderse más allá de lo esperado.

La versión inicial situaba la reunión en el departamento de Caram, secretario del bloque de diputados de La Libertad Avanza. Sin embargo, según informa el diario La Nación, nuevos datos indican que el encuentro tuvo lugar en el domicilio personal de Tomás Figueroa, secretario parlamentario de la Cámara de Diputados. Una figura clave, Figueroa es un hombre cercano a Martín Menem y ha desempeñado un papel relevante en la política, siendo hijo del fallecido exsenador José Oscar Figueroa.

La gravedad de la situación se intensifica al considerar que la reunión se llevó a cabo en la residencia de un alto funcionario del Congreso. Este acto que contraviene las normativas legales que establecen que la actividad legislativa ya que debe desarrollarse exclusivamente en el Congreso y edificios oficiales.

La atención ahora se centra en Martín Menem, quien se ve obligado a explicar. La negociación del controvertido dictamen se trasladó fuera del ámbito legislativo. Además, se cuestiona si el propósito de la reunión era modificar un dictamen que tardó 14 horas en ser publicado en el sitio web de Diputados. Las críticas de Milei hacia Menem por lo que considera una mala negociación también añaden presión al escenario político.

El temor a posibles denuncias penales se ha extendido entre los diputados, incluyendo figuras como Miguel Pichetto y Oscar Agost Carreño, quienes han salido a negar su participación en las reuniones secretas.

Se siguen sumando episodios a esta tragicomedia de enredos políticos cuyos actores secundarios somos ni más ni menos que todos los argentinos.