En un giro inesperado, Facundo Manes ha lanzado un desafío al Gobierno al anticipar que no votará a favor de las facultades delegadas propuestas para Javier Milei. Este radical movimiento ha encendido las alarmas entre los libertarios, quienes, en la previa de la sesión, daban por sentado que contaban con los votos necesarios.
El neurocientífico, líder de un sub-bloque conformado por 10 radicales, no escatimó en críticas hacia Milei, acusándolo de prepotente y antisocial. Este inesperado giro en la posición de Manes plantea un obstáculo significativo para La Libertad Avanza, ya que, sin esos votos, dependen del respaldo del resto de los radicales, liderados por Rodrigo de Loredo y el bloque de los Pichettos, para aprobar las facultades delegadas.
En su duro discurso, Manes declaró: “Les diremos no a los populismos de izquierda, a los de derecha, a los prepotentes, a los descalificadores, a los que presionan en las redes sociales, a los iluminados que ofrecen pedantería, histrionismo, teatralidad, conductas antisociales e improvisación”.
El mensaje de Manes es claro: su sub-bloque no apoyará facultades extraordinarias. “No cuenten con nosotros para facultades extraordinarias”, advirtió el radical, subrayando su firme posición en contra de otorgar poderes excepcionales.
Manes expresó su visión de un país moderno, próspero e integrado al mundo, abogando por leyes modernas y un Estado eficiente. “Queremos ser más eficientes y competitivos en la economía, queremos un Estado más eficiente, honesto, con menos regulaciones y que funcione, sobre todo que esté al servicio de la gente”, enfatizó.
Este enfrentamiento político entre Manes y el gobierno deja en vilo el resultado de la votación de las facultades delegadas, demostrando que, en el complicado escenario político actual, ningún voto puede darse por sentado. La incertidumbre reina mientras La Libertad Avanza se enfrenta a la resistencia inesperada de Facundo Manes y su sub-bloque radical.
