Se cumplieron los 15 años necesarios para que China, que en el año 2001 ingresó a la OMC (Organización Mundial de Comercio) en calidad de no-mercado, fuera reconocida como miembro pleno de la organización y formalmente como economía de mercado.
Así, las sanciones que pesaban sobre sus productos ( en forma de alícuotas sobre la importación) quedarían finalmente sin efecto. Por otra parte, este fin de semana fueron varios los países que se manifestaron en no aceptar a China como economía de mercado, entre ellos Estados Unidos y la Unión Europea, ya que, según ellos, China se encuentra a mucha distancia de respetar las reglas del juego que acatan todos los países capitalistas.
La queja principal es que el gigante asiático subsidia en demasía a sus industrias.
Luego el compromiso fue ratificado por la presidenta mandato cumplido Cristina Fernandez de Kirchner al momento de negociar el primer swap, pero, hete aquí que el presidente Mauricio Macri decidió seguir el ejemplos de los monstruos capitalistas de occidente, y, según La Política Online el presidente ya le comunicó al presidente chino Xi Jinping la decisión. La excusa esgrimida fue que la Argentina tiene aún algunos proyectos con el financiamiento trabado acordados en la gestión anterior, y que, con la economía en recesión la industria está sufriendo récord de caída, por lo que la presión de este sector es muy fuerte, y es por esto que se quedó sin margen político para propiciar que las manufacturas chinas lleguen al país.
De todas maneras, como aún tiene la esperanza de que le financien algunas obras de infraestructura clave, no hizo público su posicionamiento, a fin de minimizar la reacción de China.
Como la decisión todavía no fue formalizada, de momento, China no ha presentado contra Argentina un recurso similar a los presentados contra Europa y Estados Unidos, ni han transcurrido otras represalias.
Patty Mariño Issler
