Dos profesoras, Valeria y Ariana, fueron encontradas con vida tras haber desaparecido durante una salida en el Valle de los Perdidos. Este suceso ha tenido a la comunidad y a las autoridades con el corazón en un puño, desplegando un operativo de búsqueda intensiva para localizarlas. La noticia trajo alivio a familiares y amigos, mostrando el buen resultado del trabajo en equipo en situaciones complicadas.
Una desaparición que puso a toda la zona de cabeza
Ambas mujeres, de 40 y 44 años, fueron vistas por última vez el pasado viernes 2 de mayo al mediodía cuando salieron desde el refugio Cerro Lindo. Valeria es oriunda de Neuquén capital, y Ariana viene de la localidad de Cinco Saltos, en el Alto Valle. Al ser ambas profesoras, su desaparición generó un susto inmediato, sobre todo por enfrentar condiciones meteorológicas difíciles (las bajas temperaturas complicaron la situación).
El encargado del refugio alertó a las autoridades al notar que no regresaron y que dejaron sus pertenencias. Esto dio pie a un operativo coordinado por Juan Carlos Martínez, jefe de bomberos de El Bolsón, quien comentó: “Estábamos preocupados porque pasaron dos noches en la montaña con temperaturas muy bajas. Pero, por suerte, se encuentran bien. Con vida.”
Búsqueda a fondo
El operativo contó con la participación de varios cuerpos especializados. Se sumaron la Gendarmería Nacional, la Brigada de Montaña de El Bolsón, los Bomberos Voluntarios de Lago Puelo, la Policía de Río Negro y organismos de Protección Civil. Además, equipos del Parque Nacional Lago Puelo se unieron, usando drones, perros rastreadores y personal capacitado en rescates en terrenos complicados.
La búsqueda arrancó el sábado por la mañana y se intensificó el domingo, con un grupo de al menos 15 agentes recorriendo el lugar a pie. El terreno, con senderos boscosos y zonas muy densas, hizo que la tarea fuera especialmente dura. “Esta zona es complicada para buscar (…) siempre se depende del clima para avanzar,” comentó Martínez.
Retos durante la operación
El Valle de los Perdidos se caracteriza por su geografía irregular, lo que complicó bastantes las labores de búsqueda. La falta de registro del ascenso en la Oficina de la Montaña hizo difícil tener datos precisos sobre la ruta seguida. Las lluvias y la niebla que se dieron en esos días tampoco ayudaron mucho (la visibilidad era muy reducida).
“Se perdieron en un lugar que se llama justamente el Valle de los Perdidos (…) es muy fácil extraviarse y salirse del sendero,” explicó Juan Carlos Martínez, haciendo hincapié en lo sencillo que es perderse si no se está familiarizado con el terreno.
Seguridad ante todo: medidas preventivas
Para garantizar la seguridad tanto de los equipos como de la gente, se decidió cerrar temporalmente el acceso al Área Natural Protegida Río Azul – Lago Escondido a través del Camping Río Azul.
Esta medida destaca lo importante que es siempre priorizar la seguridad en actividades al aire libre en zonas agrestes.
Finalmente, las mujeres fueron halladas conscientes y ya se está trasladándolas a caballo hacia un lugar más accesible, desde donde un helicóptero facilitará su evacuación de forma segura. Por ahora, no se han confirmado lesiones de preocupación, pero lo importante es que están vivas y en buen estado.
Este suceso pone de relieve no solo los riesgos de las aventuras al aire libre, sino también la capacidad de la gente para organizarse ante situaciones complicadas. Además, nos recuerda lo importante que es estar bien preparados antes de lanzarse a este tipo de experiencias (una recomendación tanto para locales como para los que disfrutan de estas maravillosas y a veces desafiantes zonas naturales), asegurándose de contar siempre con la información y el equipo necesario para evitar problemas de sobra.
